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 A nivel subatómico, la realidad es muy distinta de lo que pensamos sea nuestra realidad. La física cuántica nos muestra un mundo en el que las partículas pueden existir en un estado de superposición, en el que pueden entrar en estados globales de vibración unitaria.

La coherencia cuántica surge cuando partículas, como átomos o moléculas, interactúan y se coordinan de tal manera que mantienen un estado de resonancia.

En el campo biológico, puede desempeñar un papel importante en los procesos vitales. Por ejemplo, puede estar implicada en la fotosíntesis de las plantas, donde la luz se convierte en energía química mediante procesos cuánticos muy eficientes, o en la transmisión de información dentro de las células y entre ellas. Así también hay en el agua biológica estructuras constituidas por agrupaciones de millones de moléculas que muestran un comportamiento colectivo , vibran al unísono.

Los sistemas biológicos pueden utilizar la coherencia cuántica para aprovechar la eficacia y velocidad de las interacciones a nivel subatómico, lo que permite una transferencia rápida y eficaz de energía e información.

Nada existe en el universo que no esté en el cuerpo humano, nada existe en el cuerpo humano que no esté en el universo. (pref. libro Medicina Quantistica Prof. Franco Fraschini)